Sindicato de actores aprueba el uso de voces de inteligencia artificial en videojuegos

En un nuevo capítulo de la evolución tecnológica en la industria del entretenimiento, el Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA) ha firmado un acuerdo histórico con el estudio de locución de inteligencia artificial Replica Studios. Este convenio permitirá el uso de voces generadas por inteligencia artificial (IA) en la creación de personajes para videojuegos.

Duncan Crabtree-Ireland, director ejecutivo del sindicato, afirmó que este acuerdo representa un paso evolutivo necesario. Los términos del convenio incluyen el consentimiento para la creación de réplicas de voz digitales mediante IA, así como el almacenamiento seguro de activos digitales, un aspecto vital para garantizar la integridad y propiedad de las interpretaciones.

"Este es el tipo de términos que los productores pueden aceptar sin afectar su capacidad de crear contenido. Este es un paso evolutivo hacia adelante. La tecnología de IA no es algo que podamos bloquear. No es algo que podamos detener. Esa no es una táctica o una estrategia que haya funcionado para los trabajadores en el pasado", destacó Crabtree-Ireland.

Sin embargo, esta decisión no ha sido recibida con entusiasmo unánime. Varios actores y actrices reconocidos en la industria de los videojuegos, como Erika Ishii, Steve Blum y Melissa Medina, han expresado su descontento a través de las redes sociales. Estos artistas, que han prestado sus voces a personajes icónicos en juegos populares como Apex Legends, Marvel, Mortal Kombat, Starfield y Valorant, entre otros, cuestionan la medida y temen que pueda afectar la calidad y autenticidad de las interpretaciones en los videojuegos.

A pesar de los esfuerzos del sindicato por presentar la adopción de la IA como un beneficio para los artistas, existe una creciente preocupación dentro de la comunidad de actores de videojuegos. La posibilidad de que este avance tecnológico reemplace papeles tradicionalmente desempeñados por actores humanos ha generado inquietudes sobre la pérdida de empleo y la calidad artística de las producciones.

En este contexto, algunos expertos de la industria sugieren que este conflicto podría dar lugar a una nueva huelga en el mundo de los videojuegos, en la que los actores podrían expresar su desacuerdo con el sindicato y sus esfuerzos por integrar la inteligencia artificial en la creación de contenido.

El debate sobre la introducción de voces generadas por inteligencia artificial en los videojuegos seguramente continuará, mientras la industria navega por el delicado equilibrio entre la innovación tecnológica y la preservación de la calidad artística y los derechos laborales de los actores.