China construye ciudad flotante que revolucionará la vida submarina

China está a punto de transformar la vida urbana con la construcción de una ciudad flotante innovadora, proyectada para extenderse sobre mil hectáreas en el océano y equipada con infraestructuras tanto subacuáticas como sobre el nivel del mar. La “Ciudad Flotante” promete un diseño inédito, que incluye calles submarinas y una red de transporte a través de barcos y submarinos, además de áreas verdes situadas tanto por encima como por debajo del agua.

Este ambicioso proyecto fue encargado a la empresa china responsable del puente Hong Kong-Zhuhai-Macao, una estructura de 55 kilómetros de extensión que combina puentes colgantes, islas artificiales y un túnel submarino prefabricado en secciones. Aprovechando la tecnología de construcción modular utilizada en este puente, la ciudad flotante será ensamblada en tierra y posteriormente trasladada al océano en segmentos, asegurando una instalación rápida y precisa.

Los arquitectos de AT Design Office y los ingenieros chinos han desarrollado un modelo urbano que consta de módulos hexagonales conectados, los cuales proporcionarán espacios de vida, trabajo y ocio de manera sustentable. Esta innovadora disposición permitirá la inclusión de un hotel flotante, un centro de entretenimiento, granjas productoras de alimentos, e incluso un puerto deportivo y una terminal de cruceros.

La Ciudad Flotante no solo busca ofrecer un hábitat autosustentable, sino también abrir nuevas posibilidades para la vida marina y la recreación en el océano. Los espacios verdes y las áreas recreativas estarán estratégicamente situadas para brindar vistas tanto de la superficie como del mundo submarino, un concepto que se espera atraer tanto a residentes como a turistas interesados ​​en una experiencia de vida completamente novedosa.

Este tipo de construcción autosustentable busca reducir el impacto ambiental al emplear tecnología de reciclaje de desechos y sistemas avanzados para la producción de alimentos. Las granjas flotantes integradas permitirán el cultivo local de alimentos y la generación de energías limpias, lo que garantizará la independencia de la ciudad en cuanto a recursos esenciales.

La construcción de esta ciudad flotante está prevista para comenzar en los próximos años, marcando un avance significativo en la arquitectura marítima. China se coloca a la vanguardia en proyectos de infraestructura oceánica, abriendo el camino a un futuro donde la vida urbana pueda expandirse hacia el mar, generando nuevos paradigmas para la vida en el planeta.