Lluvias y huaicos en Perú dejan graves daños en varias regiones

Las intensas precipitaciones registradas en distintas regiones de Perú han provocado serios daños en carreteras, hospitales, escuelas y viviendas, poniendo en estado de emergencia a varias localidades. El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) ha declarado alerta roja en los caudales de al menos diez ríos, entre ellos el Rímac y el Huallaga, ante el riesgo inminente de desbordes e inundaciones.

En Lima, Ica, Arequipa y Huánuco, las lluvias del miércoles 12 de febrero han causado el colapso de importantes vías, obligando al cierre de puentes y dejando incomunicadas a diversas zonas. En Ica, la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Regional sufrió filtraciones de agua, lo que llevó a la suspensión del servicio eléctrico para evitar mayores riesgos. Además, escuelas, mercados y viviendas han quedado gravemente afectadas, mientras las autoridades realizan inspecciones para evaluar los daños.

El Senamhi ha advertido sobre la persistencia de lluvias en regiones como Áncash, Ayacucho, Huancavelica, Junín y Pasco, donde 48 distritos han sido declarados en peligro. En Chosica, el puente Caracol fue clausurado debido al aumento del caudal del río Rímac, mientras que en Arequipa un huaico bloqueó la Panamericana Sur, dejando varados a cientos de viajeros. En respuesta, maquinaria pesada ha sido movilizada para despejar las vías afectadas.

La activación de quebradas en Ica ha destruido más de 30 viviendas en Cajuca y Nazca, dejando a muchas familias sin hogar. En los sectores de Los Jardines y Vista Alegre, varias casas quedaron inundadas. Por otro lado, la Policía Nacional rescató a un perro de seis meses que había quedado atrapado tras un huaico en Paucarpata, brindándole atención inmediata.

Las autoridades continúan monitoreando la situación y han exhortado a la población a tomar precauciones ante posibles deslizamientos y crecidas de los ríos. Defensa Civil y otros organismos de respuesta rápida trabajan para atender a los damnificados y evitar nuevas tragedias derivadas de las inclemencias del clima.