Israel confirma la muerte del líder de Hamás Yahya Sinwar

Israel este anunció el jueves la muerte de Yahya Sinwar, líder de Hamás y responsable de coordinar los ataques del 7 de octubre que resultaron en la muerte de más de 1.200 israelíes. Sinwar fue abatido durante una operación militar en la ciudad de Rafah, al sur de Gaza. El ataque también cobró la vida de otros dos militantes de la organización.

El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Israel Katz, destacó la importancia de la operación, calificándola como un "logro militar y moral significativo". Katz afirmó que la eliminación de Sinwar abre la posibilidad de liberar a los rehenes capturados por Hamás y podría llevar a un cambio en la situación de Gaza, sin la presencia de esta organización y sin influencia iraní.

Yahya Sinwar, de 61 años, era considerado el "cerebro" detrás de los ataques de octubre, en los que cientos de combatientes de Hamás cruzaron la frontera desde Gaza, llevando a cabo una masacre sin precedentes. Desde entonces, Sinwar se había convertido en el objetivo número uno de Israel en su lucha contra Hamás.

La identificación del cuerpo de Sinwar se prolongó durante varias horas, tras encontrarse entre los escombros de un edificio destruido en Rafah, producto de los intensos bombardeos israelíes. Este hecho marca un importante éxito militar para Israel, que apenas unos meses antes había eliminado a Ismail Haniyeh, predecesor de Sinwar.

Desde su liberación de una prisión israelí en 2011 como parte de un intercambio de prisioneros, Sinwar se consolidó como un líder de línea dura dentro de Hamás, promoviendo el conflicto armado por encima de cualquier vía diplomática. Su influencia se expande tanto en la esfera política como en la militar de la organización.

A pesar de la gravedad de este golpe para Hamás, los expertos sugieren que la organización, considerada terrorista por varios países occidentales, seguirá luchando contra Israel. Sin embargo, la pérdida de Sinwar deja un vacío difícil de llenar debido a su control centralizado y la estructura jerárquica que mantenía junto a su hermano Mohamed, responsable de los batallones armados más poderosos de la franja.

Por su parte, Israel continúa con su ofensiva militar, reafirmando que no detendrá sus ataques hasta cumplir sus objetivos: la eliminación de Hamás y el retorno de los rehenes capturados en los ataques de octubre.

La comunidad internacional, mientras tanto, sigue observando con preocupación los desarrollos en Gaza. Pese a los esfuerzos de mediación, las negociaciones para un alto fuego permanente no han avanzado significativamente, lo que plantea la posibilidad de un conflicto prolongado en la región.