4 de cada 10 declaraciones que hacen las marcas sobre ropa sostenible son falsas o engañosas
El aumento de compras online de moda irá reduciéndose con los años: se prevé que para el 2027 el aumento sólo sea del 1,9%.
La moda online sigue siendo uno de los sectores más potentes cuando se trata de ecommerce: según cifras proporcionadas por Euromonitor, se prevé que este 2023 las ventas de moda se eleven un 3,6%, aunque irán reduciendo su crecimiento con los años, de tal forma que en 2027 este aumento sólo sea del 1,9%. Una de las razones que explica esta tendencia tiene que ver con la priorización de la sostenibilidad a la hora de realizar las compras. Según Natalia Fernández, CEO de la marca de ropa sostenible Wanderlove, “ya no sólo se está priorizando qué se compra, sino también cómo se compra, hecho que explica que se vayan a reducir las ventas y se empiecen a buscar otras alternativas para adquirir ropa”.
Comprar ropa online y hacerlo de forma sostenible implica tener en mente un conjunto de factores que hasta hace poco la mayoría de gente pasaba por alto, como los materiales del envoltorio del paquete o bien los tejidos de las prendas. Sin embargo, es importante comprobar que realmente las marcas se ajustan a los parámetros de sostenibilidad, ya que muchas llevan a cabo un blanqueo ecológico que puede hacer pensar al consumidor que está comprando de forma ética. En este sentido, se calcula que 4 de cada 10 declaraciones sobre moda sostenible que hacen las marcas son falsas o engañosas, según un estudio citado por la Comisión Europea en el marco del Green Deal.
Por esta razón, “es imprescindible que los consumidores dispongan de un manual de compra que les permita, por un lado, comprobar si realmente lo que están comprando es sostenible y, por otro, saber cómo consumir moda con el menor impacto posible para el medio ambiente”, aclara la CEO de Wanderlove. En consecuencia a esto, Natalia Fernández, presenta un manual de compra cargado de consejos para comprar moda online y hacerlo de forma sostenible:
● Investiga sobre la marca: antes de lanzarte a comprar, realiza una búsqueda sobre el origen y los valores de la marca. Comprobar que su producción es artesana y de corazón es imprescindible si realmente buscas que tus compras sean éticas. De esta forma, podrás evitar destinar tu dinero a empresas que llevan a cabo un blanqueo ecológico o greenwashing.
● Fíjate en el envoltorio: Para reducir al máximo el consumo de plásticos, es crucial que te informes sobre cómo va a enviarte la marca el producto. Pregúntate si el material que emplea es ecológico y reciclado y si los envíos que realizan se hacen mediante vehículos de transporte sostenibles.
● Apuesta por materiales reciclados y fibras naturales: es importante que priorices piezas de ropa cuyos tejidos tengan el menor impacto medioambiental posible. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el cuero, la seda y la lana son algunos de los tejidos que más impacto generan. Por contra, el cáñamo, el algodón orgánico o el lino son fibras mucho más sostenibles, por lo que comprar piezas compuestas por estos materiales es crucial si deseas comprar de forma ética.
● ¿Realmente te hace falta esa prenda? Uno de los pasos fundamentales para comprar de forma sostenible es cuestionarse si realmente hace falta hacer esa compra. No hay nada más ecológico que evitar adquirir prendas de forma innecesaria. Valora si realmente te hace falta, si la vas a poder combinar y si le vas a dar uso durante un periodo de tiempo extendido.
● Consulta tus dudas sobre la talla: Para que una pieza de ropa sea útil y no se quede tirada en el fondo del armario, es crucial que se ajuste a ti para que le puedas dar uso. Fíjate bien en las tallas, mide tu cuerpo si es necesario y consulta tus dudas a la marca para asegurarte de que el envío -y las cargas medioambientales que este mismo puede conllevar- van a tener un sentido y van a ser fructíferos.
● Alarga la vida de la prenda: Comprar de forma sostenible no es sólo lo que se hace antes de tener la prenda en tus manos, sino también después. Regalar la ropa que ya no usas a otra persona que pueda alargar su vida útil significa evitar compras innecesarias, ampliar armarios y contribuir al ahorro de los demás.